25 mayo, 2013

La revolución del 54. AMJ

Entre 1854 y 1868 tiene lugar la 2 fase del reinado de Isabel II. Ambas fechas son el inicio de dos revoluciones, la primera iniciará el bienio progresista y la segunda la revolucion de 1868, llamada tambien "Septembrina" o "Gloriosa", que supuso el destronamiento de Isabel II y seis año de destronamiento democratico.
Los ultimos años de la decada moderada se caracteriza por la corrupcion administrativa, precedida de un retroceso en las libertades. La oposicion del gobierno partio esta vez de los mismos moderados, a los O'Donnell presto su espada y las masas populares dieron su apoyo.
La revolucion del 54, para algunos historiadores version europea del 48, presenta en su desarrollo un proceso revolucionario completo.
Se inicia una crisis parlamentaria seguida por el clasico pronunciamiento donde el general O'Donnell se pronuncia contra el gobierno de Vicalvarado y Canovas del Castillo suministra la base ideologica atraves de un manifiesto de Manzanares, que recogia los puntos basicos de los progresistas: mejora de la ley electoral y de imprenta, descentralizacion de la administracion, rebaja de los impuestos y restauracion de la milicia nacional. A ello hay que sumar una serie de levantamientos populares como los de Madrid, San Sebastian, Barcelona y Zaragoza.
La reina llama a Espartero y le encargaba la formacion de un gobierno que compartira con O'Donnell, que durara solo dos años y tendra como primer objetivo la elaboracion de una nueva constitucion (la de 1856) que no llego a ser vigente, la "non nata" En ella se recogen los principios ideologicos de la busguesia radical española. El principal de ellos es el de la soberania nacional, bandera del liberalismo progresista frente a la soberania compartida, propia del liberalismo dostrinario.
La obra politica del gobierno se centra en la promulgacion de la "Ley de Desamortizacion General" que Pascual Madoz(1855), y en la defensa del regimen a traves de la Union Liberal, partido eclectico fundado por O'Donnell, que aglutinaba a los menos radicales tanto del partido moderado como del progresista y que puede considerarse como el primer partido de centro. A la izquierda del partido gobernante queda el joven partido democratico, en el que se destaca Catelas; a la dereccha rebrotara el carlismo que protagonizara un levantamiento fallido.
Las agitaciones sociales que tienen lugar en Cataluña, Zaragoza, Levante y, por primera vez, enel campo castellano provoca, la dimision de Espartero quien cede el gobierno a su ministro O'Donnell.